El Centro Comercial San Ignacio, referente de la arquitectura contemporánea de Caracas, también sufre de esa enfermedad que el Arq. Tomás José Sanabria, en el año 2000, definió como la «ranchosis» (1).
En palabras del mismo Sanabria: «sufren de Ranchosis los que compran su vivienda y al pagar su cuota inicial proceden, cual reflejo condicionado, a modificarla lo mas posible, construyen en los retiros (si se trata de una casa) así sea un multimillonario, invadiendo los balcones (en caso de apartamentos) sin importarle en absoluto lo que ello pueda significar para el vecino y como este sufre de la misma enfermedad no valora el hecho, hace lo propio y así continuamos la ranchificación».
En ese sentido, quienes visitan el mencionado centro comercial, aparte de ser testigos de una considerable publicidad comercial, colocada en pasillos, paredes interiores y exteriores, ahora se encontrarán con una construcción en su fachada, síntoma inequívoco de esa «ranchosis».
Qué pensará el arquitecto proyectista de esta intervención? Qué pensarán aquellos arquitectos que defienden el patrimonio arquitectónico?
En fin, la obra concluirá y formará parte de la nueva visual del centro comercial.
Arq. Jesús Yépez
Fotografías tomadas el 31 de octubre de 2014.
(1). La Ranchosis. Por el Arq. Tomás José Sanabria.
http://entrerayas.com/2012/12/la-ranchosis-por-el-arq-tomas-jose-sanabria/
¿Y cuál es la razón para que destruyan esta obra? Es uno de los pocos CC pensados en el usuario, para disfrute del entorno.
totalmente de acuerdo. En uno de los Arquitours que organiza Chacao y que tengo el privilegio de guiar junto con los arquitectos Ines Casanova y Orlando Marin, invitamos a uno de los proyectistas, el Arquitecto Carlos Gomez de Llerena y el se mostró muy afectado por esas intervenciones que sin duda afectan la valoración de ese conjunto de gran calidad arquitectónica. La publicidad en las fachadas de los edificios ha llenado de huecos el exquisito trabajo del ladrillo, parecen heridas de guerra! Y la inefable gigantografía que cuelga entre los dos edificios impide la lectura de uno de los aspectos mas resaltantes del diseño que es esa apertura a El Avila con la perspectiva desde el Bulevar Arturo Uslar Pietri. Es preocupante que la rentabilidad que buscan los centros comerciales no tome en cuenta que también es rentable la conservación del patrimonio como uno de sus atractivos a ofertar.
Más que preocuparse por la propaganda colgada entre los dos edificos que en definitiva debe ser temporal (es una tela) yo me ocuparía del mal estado de las piezas de arcilla del revestimiento. Para ser un edificio tan nuevo (menos de 30 años) esto no debería estar ocurriendo. Por lo menos muestra falta de mantenimiento si no es mala construcción. Los edificios no pertenecen a los arquitectos sino a quienes lo adquieren. La desgracia de esta profesión es que nos encariñamos con nuestras obras que en todos los casos, tienen efecto directo en la ciudad realzando su belleza o afeándola, para no hablar de función, usos y de su papel en la memoria colectiva. Pero los edificios son objetos mercantiles, se compran y se venden, y al buen o mal uso que le den nos queda poco pataleo. Por eso es que a la hora de diseñar hay que pensar en lo peor que le puede pasar y, tratar de minimizar ese destino con los recursos que manejamos los arquitectos. Claro, siempre habrá alguien capaz de dañar el efecto final previsto y lo asumiremos con resignación.
Llevada al estilo «Strip» de Las Vegas, tendencia Arquitectófaga generalizada que devora la oportunidad de la Arquitectura a formar o enmarcar la percepción el individuo de la ciudad. Una competencia sin ganadores para rentabilizar la perdida. Hacerse daño para verse bien, es Hedonismo cirenaico decadente.
CAPITALISMO PURO; NO NOS ENGAÑEMOS, MEJOR DICHO; NO SE ENGAÑEN.
ATENTAMENTE
R.A.H.
señores veo que todos opinan y ninguno sabe que van a construir ahí!! primero que nada hay que averiguar porque se hizo esa modificación y si tiene un beneficio para la comunidad , antes de ponernos a criticar y mas aun a politizar!! tal vez es un ancianato y uds con duras criticas.
Estimados, les cuento que cada vez que me asomo por la ventana de mi oficina, me duelen los ojos de arquitecto al toparme con la parte trasera de esta atrocidad. Sí, trabajo en una de las torres del Centro San Ignacio, justo detrás del «perol», y me he «calado» la construcción completica del «rancho-pasillo» -como yo lo llamo, por su forma alargada- . El «pegoste» en cuestión no es más que una ampliación del local de abajo (que muchos conocimos hace unos años como la discoteca «Vintage»), que ahora será un gimnasio, y la nueva planta superior será, al parecer, el cafetín, según me comentó recientemente una de las empleadas de la Administración del Centro Comercial. Para este fin ya realizaron la correspondiente abertura en la losa y construyeron la escalera (que asumo debe ocupar medio local). Ahora que perdí una importante porción de mi vista al Sur de Caracas, a estas alturas ya espero que por menos le den un buen acabado y no me siga mirando cara… Saludos
Corrección: con esa cara*
y esta no es tarea de Ing Municipal?????
Le cuento al señor Alberto que preguntó que se va a hacer ahí, que lo que están construyendo es un gimnasio, construcción que primero comenzó dentro de los límites de los límites permitidos por el centro comercial (en un local delimitado que estaban habilitando para este fin) y de un día para otro sin son ni ton, comenzaron «ampliar» esos límites permitidos y a lanzar estructuras que hacer ver esa parte del centro comercial en ese estado lamentable. Me pregunto qué (o cuánto mas bien) habrá hecho que se flexibilizaran las normas de un centro comercial que de antaño era tan estricto con sus condóminos y tan fiel cumplidora de los permisos y ordenanzas municipales…por la plata baila el mono.
Me parece buenísimo!!! Lo que le hacía falta a este centro comercial es un gimnasio. El que no cambia y no modifica está condenado a quedarse atrás. No se construye nada de la noche a la mañana, obviamente la primera etapa de una obra siempre serán ladrillos y el resultado lo veremos cuando esté listo. Mi apoyo total a esa obra!!!
Los primeros con RANCHOSIS son los que dirigen la dirección de Ingeniería Municipal, como es posible que se autorice semejante construcción, no hay mayor cupable que la Alcaldía.
Estoy de acuerdo con Daniella, a este Centro Comercial le hace falta un gimnacio, adicionalmente hay que esperar a que la obra culmine para que los acabados le den el detalle final, a simple vista pareciera que la volumetria entre ambas torres lejos de perderce mejorara en su equilibrio visual !!!
De verdad que todo parche desvirtúa la génesis…sea como sea que la terminen.
La mayor ranchosis se debe a que quienes están apoderados de ese CC son unos marginales… Los dueños de la Vitalicia, de Globovision etc amigotes y compadres del tuerto Andrade, Diosdado Cabello entre otros! Ahhhh, ser rico es malisimo!
a mi parecer esto se ve horrible y afecta la inversion de quien tiene un local y oficina alli .
se ve como un rancho
Ya denuncie en la oficina del Alcalde y de Ingenieria Municipal, no he tenido respuesta por parte de ninguno de ellos hasta la fecha 25 de Marzo 2015, dejo constancia por estos medios y a todo el que se vea afectado directa o indirectamente lo invito a que denuncie formalmente en el Edificio Atrium del Rosal en Chacao en el Piso 5 en Ingenieria Municipal, las leyes están para ser cumplidas el que no denuncie que después no se queje.