Sin importar la edad, cada aprendizaje, nos da la oportunidad de crecer.
Eso lo tienen muy claro quienes decidieron aprovechar nuestros programas de formación en oficios productivos para poder tener una actividad que les permita salir adelante y contribuir con el progreso de sus comunidades.
Ese es el caso de Francisco Galindo, quien luego de graduarse ha aportado sus conocimientos a la construcción y reparación de nuestras escuelas en Barlovento. Estamos orgullosos de nuestros hombres y mujeres mirandinos, quienes se han graduado de nuestras escuelas de Constructores Populares.
Ya van cinco promociones y 1.589 constructores populares desde que creamos este programa, gracias al convenio con nuestra UCV. Y esta cifra seguirá creciendo pues creemos en el emprendimiento y ante la situación que vivimos en Venezuela, es fundamental ofrecer a nuestro pueblo herramientas para progresar.
Texto y fotografías tomados del facebook de la Urb. Adriana D’Elia