En la década de los 50 fue encargado al arquitecto Carlos Raúl Villanueva el proyecto de la sede de la Universidad Central de Venezuela, estimando una población estudiantil de 5000 alumnos, con una previsión de 20 escuelas que funcionarían en 65 edificaciones, todo ello enclavado en un terreno de 164 hectáreas de estupenda topografía ubicado en un sector neurálgico de la ciudad de Caracas. El proyecto se ejecutó con modificaciones consecutivas y fluidas que se generaron en el proceso de maduración de la idea inicial y se concretaron en importantes aspectos los cuales mas tarde serian objeto de reconocimientos tanto nacional como internacional. Múltiples temas imbricados: la propuesta paisajista, el vehiculo, la perspectiva, los volúmenes, la tropicalidad, la integración de las artes, el alarde estructural, la ultima tecnología constructiva, fueron todos conceptos elaborados y llevados hasta el mas sublime desarrollo conjugando en este collage lo que conocemos como la Ciudad Universitaria de Caracas.
Los reconocimientos al valor arquitectónico, artístico y de conjunto de la Ciudad Universitaria de Caracas han sido múltiples; desde 1947 se evidencia el valor de este ambicioso proyecto cuando el Congreso Panamericano de Arquitectura (Lima), adjudica el premio a Carlos Raúl Villanueva por su proyecto de la sede de la Universidad Central de Venezuela, cuya construcción ya se había iniciado en el año 1943. Prácticamente desde la fecha de la construcción de este Conjunto se generó una tendencia a su valoración y preservación, sin embargo es importante recordar que ha habido algunos momentos en que la Ciudad Universitaria de Caracas ha sido victima del acalorado debate político con la lamentable e incomprensible agresión física en sus edificios y obras de arte.
A pesar de las evidencias de desapego a la conservación de la Ciudad Universitaria durante algunas décadas (como en los años 70), han surgido dentro de la estructura administrativa de la Universidad Central de Venezuela, estructuras y unidades cuyo objetivo habría sido el mantenimiento, el desarrollo y la conservación de este conjunto urbano y de sus contenidos. Es así como se crea la Unidad de Conservación de Obras de Arte, la Dirección de Planeamiento (para todo lo concerniente al mantenimiento y la ejecución de las obras aun sin concluir para esa fecha).
Sin embargo es durante la década de los 90 cuando se concretan reconocimientos que tendrán repercusión sobre el acercamiento a la conservación de la Ciudad Universitaria; la declaratoria como Monumento Histórico de la Nación (1 de Septiembre de 1993); más tarde, el 10 de Junio de 1998 se ratifica dicha declaratoria incluyendo espacios dedicados al deporte, la recreación, el jardín Botánico, la sede de la antigua Escuela Técnica Industrial, hoy Facultad de Ciencias, así como los espacios paisajísticos de los mismos, y por último en 2000, el 2 de Diciembre, la UNESCO emite la Declaratoria de Patrimonio Mundial en virtud de los valores significativos de este Conjunto Urbano. Estas declaratorias aunadas a la situación de reorganización interna de la Universidad Central de Venezuela, así como al compromiso del Estado venezolano en disponer de una oficina de gestión de este Patrimonio Mundial, se conjugaron para acelerar la creación del Consejo de Preservación y Desarrollo de la UCV-COPRED.
El COPRED es un organismo que entiende el patrimonio al servicio de la comunidad académica y de los ciudadanos; tiene como misión primordial velar por la preservación, el desarrollo, la conservación, difusión y apropiación social de este conjunto que atiene usos de singular necesidad social y que es sede de la más antigua universidad del país, buscando orientar, reglamentar y fomentar los procesos de recuperación y adecuación de la planta física con una visión integral de su problemática, valorizándola y conservándola, con miras a obtener en el largo plazo un manejo sustentable.
El trabajo de esta oficina técnica tiene dimensiones de complejidad sustanciales pues en la actualidad la Ciudad Universitaria de Caracas ha superado considerablemente las estimaciones iniciales: para 2005 la cantidad de estudiantes llegaba a 48.000, la suma de personal obrero, administrativo y docente superaba los 20.000 mientras que una población flotante de visitantes diarios ascendía a 30.000. Los vehículos contabilizados diariamente que transitan dentro del campus para ese año era de 21.000 manteniéndose los 5.100 puestos de estacionamiento y en 89 el número de edificaciones.
Dentro del campus funcionan 30 Institutos y Centros de Investigación, un Hospital de referencia nacional con capacidad de 1200 camas y atención ambulatoria permanente. Edificaciones con previsiones de atención odontológica, ambulatoria, oncológica de forma constante y en crecimiento, así como una planta de vacunas. Igualmente el área cultural de la CUC es inmensamente amplia, completa y versátil: posee una sala de teatro que además de hermosa alberga 2.696 almas; una sala de conciertos para 457 espectadores, bibliotecas, 12 auditorios, salas de exposiciones y salas de ensayo. Para complementar de forma integral la formación de los nuevos profesionales así como de empleados y profesores, se contempló la construcción de 2 Estadios (uno de béisbol y otro de fútbol), Gimnasio, campo deportivo, complejo de piscinas, canchas de tenis, así como un Jardín Botánico y Herbario Nacional de 70 hectáreas.
Las necesidades constantes e imperativas de crecimiento y actualización tecnológica son temas ineludibles y recurrentes en la Universidad; para atender de forma coherente, consciente y óptima a estas solicitudes el COPRED desarrolló primordialmente “… una importante tarea de identificación y clasificación de factores y perfiló una política de proyectos fundamentada en la necesidad de garantizar que en el corto plazo se controlaran las condicionantes de deterioro del conjunto de la CUC, en el mediano plazo se ejecutaran acciones orientadas a revertir intervenciones nocivas para la valoración y conservación del conjunto y en el largo plazo se lograra construir una conciencia de conservación generalizada extendida a cualquier usuario rutinario o visitante del conjunto…” (Nava Hung, Melin. Articulo: “Estrategias de apropiación del Patrimonio Cultural. El Caso de la Ciudad Universitaria de Caracas”. En Revista Edificar, Nº 13. ULA Venezuela. 2009). Esta tarea permitió delinear los campos de trabajo estableciendo criterios de actuación manejados bajo perspectivas de respeto a la vocación de las edificaciones, atendiendo las necesidades de crecimiento vegetativo de un conglomerado académico, con unidades de investigación y extensión que requieren de actualización tecnológica constante, sumando la necesidad de acompañar el cumplimiento de normas y reglamentos nacionales e internacionales en materia de intervención del patrimonio.
Como medida inicial se establecieron tres premisas de actuación:
• RACIONALIZAR Y CONSOLIDAR ANTES DE CRECER
• MANTENER PARA CONSERVAR
• AUTOGESTIONAR PARA SUSTENTAR
Estas han sido la materia originaria de cada acercamiento para dar respuesta a las múltiples solicitudes desde las instancias internas de la Universidad Central de Venezuela. Los programas generados por el COPRED han propiciado la inclusión de las diferentes instancias que hacen vida dentro del campus universitario, incentivando la apropiación social como elemento cohesionante entre las estrategias y los resultados.
Los programas de desarrollo institucional se han orientado a atender temas de gestión del capital humano, captación de recursos económicos así como promoción y difusión de los valores del conjunto. De igual forma se ha atiendido el desarrollo de gestión a través de importantes programas como lo son: apropiación social, conservación de bienes patrimoniales (edificaciones, obras de arte y redes de servicios), mantenimiento integral, reducción de la vulnerabilidad, consolidación del borde, asesoramiento y asistencia técnica. Insertos en cada uno de estos programas se desarrollan proyectos que aglutinan actuaciones en edificaciones, redes de servicios, espacios abiertos, obras de arte, gestión promocional, entre otros; generándose actuaciones bajo esquema de vinculación horizontal de los programas.
La gerencia de este complejo conjunto a nivel de atención de la planta física y su consecuente crecimiento, ha requerido principalmente del establecimiento de planes a mediano y largo plazo, que permitirían priorizar las actuaciones inmediatas. Por tal razón el COPRED se propuso afianzar cuatro aspectos fundamentales, no solo para garantizar la continuidad de los programas que ha desarrollado en función del cumplimiento de su misión, sino también para dar cumplimiento a los compromisos adquiridos con la comunidad internacional en virtud de la declaratoria como Patrimonio Mundial. Estas líneas de acción son las siguientes:
1. Concretar en corto plazo el Plan de Manejo de la Ciudad Universitaria de Caracas.
2. Fortalecer la participación de la comunidad ucevista en los planes de mantenimiento y preservación.
3. Incentivar la cultura del mantenimiento preventivo
4. Consolidar la organización como unidad rectora en materia de preservación y desarrollo dentro de la CUC.
Los resultados de estos complejos procesos se podrán analizar a mediano y largo plazo, sin embargo en este corto periodo de gestión de diez años el COPRED ha podido obtener importantes logros que se concretan y visualizan en mejoras sustanciales de las condiciones de los espacios, áreas verdes, edificaciones, redes y servicios así como en las obras de arte. La compleja misión se sustenta en una visión de la Universidad Central de Venezuela avanzada, tecnológicamente contemporánea y a largo plazo, en virtud de asumir objetivamente los límites cuantitativos de la planta física para garantizar un funcionamiento sostenible de la Universidad, no sólo en términos de la capacidad del espacio físico y los servicios urbanos correspondientes, sino también en términos ambientales, de mantenimiento patrimonial y de calidad de los servicios y el entorno.
En este 2010 el Consejo de Preservación y Desarrollo de la UCV, celebra su primera década de gestión de un sitio Patrimonio Mundial, enfrentándose a situaciones de constantes cambios sociales y políticos que lamentablemente y de forma colateral afectan la conservación del patrimonio; a un crecimiento poblacional progresivo, a la demanda de servicios, actualizaciones tecnológicas y a las naturales afectaciones sobre edificaciones y obras de arte por efecto del tiempo; sin embargo el avance en la determinación de los programas básicos y el diagnostico de las problemáticas mas sensibles han permitido consolidar programas que ya ofrecen sus frutos positivos en cuanto a la apropiación social de este complejo sitio urbano y a la inherente conservación del patrimonio representada en la CUC, además de haberse consolidado como elemento indicativo de referencia internacional en lo concerniente a la gestión de una “ciudad Moderna” declarada como Patrimonio Mundial. Estamos seguros de que las experiencias del Consejo de Preservación y Desarrollo de la UCV en materia de gestión, seguramente serán tema de estudio e intercambio con otros sitios mundiales que compartan características tan sensibles convirtiéndose en elementos multiplicadores de la tendencia a la preservación y el desarrollo sustentable.
Arq. MSc Nelly Del Castillo
Ex Director COPRED
(2009-2010)
Artículo publicado en la revista entre rayas No. 86, meses noviembre-diciembre 2010