Avance de los trabajos de instalación de las réplicas de las lámparas del comedor principal del Hotel Humboldt, fabricadas en bronce y aluminio por artesanos locales según diseño original del arquitecto Tomás José Sanabria. Los planos y detalles constructivos fueron realizados a partir de las fotografías históricas del archivo del arquitecto Sanabria y con el estudio de las proporciones de las mismas en relación al espacio.
Lamentablemente las lámparas originales fueron removidas en 1966, luego de ser dado en concesión el hotel a la cadena hotelera Sheraton.
Este comedor fue intervenido ese año con la intención de subdividir el espacio para insertar unos salones temáticos conocidos posteriormente como: Salón Alemán, Salón Inglés, Salón Francés y La Cafetería. Con esa intervención no sólo se perdió el concepto de un espacio moderno protegido por una bóveda de gran proporción, sino además de la comunicación visual con el resto de los espacios de la planta baja a través de los ventanales, así como la imposibilidad de poder apreciar desde su interior los jardines aledaños, el paisaje del Ávila y la vista a nuestra ciudad de Caracas.
La imagen original del comedor recientemente devuelta a su esplendor inicial, se encontró oculta durante 51 años por un plafón plano apoyado en la tabiquería que separaban los diferentes salones antes identificados.
Durante esa intervención aplicaron pintura en color negro sobre gran parte de las superficies de los vidrios de las fachadas para que no se pudieran percibir desde el exterior los bloques de arcilla de esa tabiquería agregada durante la inadecuada intervención.
Las imágenes siguientes corresponden a los agregados antes mencionados y al proceso de remoción de los mismos iniciado el 16 de mayo de 2012.
Texto y fotos:
Arq. Gregory Vertullo
La labor de rescate de esta magnifica obra seguramente tendrá importante trascendencia para nuestro patrimonio de arquitectura moderna.
La tenacidad y atención al detalle del Arq. Gregory Vertullo es realmente admirable. Una clara demostración del dominio y el respeto por los materiales y por el proyecto original del Maestro Sanabria.
Felicitaciones y mucho animo!
Hermoso. Ojalá que podamos los de este tiempo apreciar ese maravilloso trabajo de restauración y recuperación de tan encantador lugar. Sería grandioso documentar el trabajo realizado y publicarlo! Éxito!